A partir del lunes, 1 de julio, las frecuencias de la red de autobuses urbanos y del tranvía se adaptarán a la demanda de viajeros de los meses de verano. Aunque se trata de una medida habitual, su implantación se va adaptando en función de los datos de ocupación del año anterior, fundamentalmente en el caso del autobús urbano.
El servicio de Tranvía se verá modificado de manera similar a la de años anteriores, con horarios diferenciados para julio y agosto. La primera semana de septiembre recuperará los horarios de julio y, a partir del sábado 7 de septiembre, se regresa a las frecuencias habituales del resto del año.
Los días laborables de julio se mantienen las frecuencias prácticamente igual que en invierno a lo largo de la mayor parte de la jornada, con variaciones que van desde el medio minuto a los dos minutos y medio. Las horas punta en laborables se mantienen, con un pequeño incremento en la frecuencia del mediodía, pasando de 5'5 minutos a 8, de 14:30h a 16:00h.
En agosto, los días laborables cuentan con unos intervalos de paso algo superiores, ajustándose a la menor demanda por parte de los usuarios, con incrementos de dos minutos hasta mediodía.
Para estos meses estivales, los intervalos de paso de los domingos y festivos permanecen invariables respecto al resto del año.
En el caso del autobús urbano, hay 14 líneas (28, 30, 43, 50, 51, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 60, C1 y C4) que mantendrán la misma frecuencia y, en consecuencia, el mismo número de vehículos disponibles que en el horario “de invierno”.
El resto tendrá, durante los meses de julio y agosto, variaciones en la frecuencia de paso que, en las líneas más significativas (22, 23, 24, 29, 31, 32, 33 ó 35) podrían oscilar, en función del tramo horario y de las líneas, entre los 2 y los 4 minutos.
La adaptación de frecuencias se realiza en dos tramos a lo largo del verano. Así, en la primera quincena de julio se dispondrá de 8 autobuses de refuerzo (uno más que el año pasado), que estarán distribuidos en las líneas 21, 23, 24, 33 (2 vehículos), 39, Ci1 y Ci2, lo que hará que la variación del servicio sea menos significativa en esa primera quincena.
En todo caso, y como ya sucedía en veranos anteriores, la reducción en la oferta de autobuses disponibles para el servicio será menor que la disminución real del número de viajeros. Sólo en algunos casos se supera el 20% de reducción de kilómetros respecto al horario normal, pero en la inmensa mayoría de las líneas el número de viajeros de promedio baja por encima del 30 y hasta del 40%, fundamentalmente en agosto.